lunes, 9 de junio de 2008

Sueños...


¿Vienes?
Trae a tu cuerpo de la mano,
Y posa tu cabeza sobre mis hombros fatigados,
Que la fiesta del amanecer del horizonte
Pinte de fuego cielo y mar,
Y tus ojos se llenen de más magia…

Suelo perderme entre tu mirada,
Fundirme en tus labios,
Poseer tu piel, plasmarme en tu espalda,
Y luego despertar sin vos, sabiendo haberte soñado
Con una sonrisa por inercia,
Y el corazón agitado…

Suelo pensarte mía, solo mía,
Y crear imágenes de un mundo perfecto
En el que buscas protección en mis brazos
Y descanso en mi pecho…

Solo son sueños, solo son imágenes…
Lo único real son tus ojos
Y mis manos de poeta….


Fernando Guillamondegui

viernes, 6 de junio de 2008

Mis referentes


Armando Tejada Gómez y Hamlet Lima Quintana, por ésas cosas de la vida, o de la muerte, son los poetas que mas admiro. Sus artesanales palabras, palabras de pueblo, de provincia y ciudad, de viento y polen, entran en mi alma y me detienen, todo de pronto se paraliza y mi atencion sigue aquellos graves tonos de voz. No puedo describir esta sensacion, pero la comparto, porque ellos son los referentes.
La Vida Dos Veces



Miren cómo sonaba allá en mi barrio agreste
este nombre caído en los mares lejanos:
Toddy Deussán. Un chico alimentado a lirios.
Una flor de su madre que soñaba otra vida.
Supe que no quería que jugará conmigo
porque yo era la forma del pánico y el hambre
y la más descarada miseria por el mundo.
Pero Toddy, esa gracia hecha de mimbre y aire,
vivía hipnotizado por mi gran aventura.
Cuando huía del ojo celoso de su madre
se acercaba a mi sombra con cierto desenfado,
me mostraba sonriendo sus ignotos tesoros
y me buscaba el lado más pájaro del alma.


El descubrió en mis ojos cierto país del sueño
donde se desnudaba un ángel con harapos,
algunos yacimientos de enterrada inocencia
y un gran rompecabezas de ternura en mis manos.


Un día, ya vencidos por nuestra resistencia,
los padres me dejaron entrar en el santuario,
nos sirvieron un río de leche y mediaslunas
y yo los deslumbré dibujando caballos.


Después, siguió la vida, como siempre sucede,
volvió el viento de agosto y crecieron los árboles;
sus padres, que tenían el sueño de otra vida,
una tarde ceniza se mudaron de barrio.


Yo olvidé al canillita en un cruce de esquinas,
entré al jornal violento del vino y los obrajes.
Vestí los portentosos pantalones del viento
y descubrí mi oficio de fábula y guitarra.


Toddy, se llama Alfredo Deussán, vive en Mendoza,
casó con otro mimbre hace muchos veranos,
seguramente tiene un puñado de niños
y es una pajarera su comedor de diario.


Acaso, un año de éstos, cuando vuelva al oeste,
llame a su puerta clara y despierte sus pájaros,
sólo porque un amigo es la vida dos veces
y desde aquella tarde no dibujo caballos.


Armando Tejada Gómez

martes, 3 de junio de 2008


Un poema rescatado del olvido de un cajón. no recuerdo la fecha, pero debe ser eterno...



Aquí, solo,

Acariciado por una suave brisa melódica,

Recostado en una inmóvil cama vacía,

Desnudo de tus brazos ausentes

Mi boca se dibuja en un beso solitario

Mientras mis sueños desatados te recuerdan.


Y mi pecho,

erizado del veneno que es la memoria,

Abre su guarida a una ilusión imposible.

Canto, río, lloro, despierto,

Todas las emociones mezcladas en una canción vencida, nuestra,

Confluencia de sangre y recuerdos, de pasado y futuro,


Y mis ojos cerrados te observan…

Desnuda y suave, como ése pétalo escondido en un viejo libro,

De aquel clavel que nunca olvidaste,

que nunca tiraste…

Desnuda y escondida, entre las cosas viejas…

Fresca y radiante, cálida piel abrigada de mis besos.


Y mis ojos se abren, y ya no miran

Mi habitación está oscura,

Solo me redime la claridad lunar

Que por la ventana, entre tanta tiniebla

Dibuja mi cuerpo relajado,

Pero ya no estas…es el presente,

Y la canción terminó.


Como terminan todas mis noches,

Como terminan todos mis días,

Aquí,

Solo.


Fernando Guillamondegui

Tristeza


Considero al libro "El Principito" como uno de esos libros imprescindible para todo el mundo, pero mas para mi, por saber describir mis estados de ánimo, expresarlos de una manera transparente, como debe ser. Aquí les dejo un pasaje.



"¡Ah, principito!, cómo he ido comprendiendo lentamente tu vida melancólica! Durante mucho tiempo tu única distracción fue la suavidad de las puestas de sol. Este nuevo detalle lo supe al cuarto día, cuando me dijiste:
-Me gustan mucho las puestas de sol; vamos a ver una puesta de sol…
-Tendremos que esperar…
-¿Esperar qué?
-Que el sol se ponga.
Pareciste muy sorprendido primero, y después te reíste de ti mismo. Y me dijiste:
-Siempre me creo que estoy en mi casa..
En efecto, como todo el mundo sabe, cuando es mediodía en Estados Unidos, en Francia se está poniendo el sol. Sería suficiente poder trasladarse a Francia en un minuto para asistir a la puesta del sol, pero desgraciadamente Francia está demasiado lejos. En cambio, sobre tu pequeño planeta te bastaba arrastrar la silla algunos pasos para presenciar el crepúsculo cada vez que lo deseabas…

-¡Un día vi ponerse el sol cuarenta y tres veces!
Y un poco más tarde añadiste:
-¿Sabes?... Cuando uno está verdaderamente triste son agradables las puestas de sol.
-¿Estabas, pues, verdaderamente triste el dia de las cuarenta y tres veces?
El principito no respondió."